Por Josefina Martínez
La etiqueta de Varese le rinde homenaje al pasado atlético de su fundador y se une a Adidas para darle vida a una cápsula de running.
Un día antes de la largada se viralizó el anuncio: aires de gloria, al ritmo de The Who, cruza las calles de Nueva York con una retrospectiva a los Juegos Olímpicos de Londres de 1948. Ottavio Missoni era uno de los atletas del team italiano y también había diseñado los uniformes.
De ese espíritu deportivo impreso en su ADN nace la asociación con Adidas Running. Es la primera vez que colaboran y combinan la tecnología, confort y alto rendimiento alemanes con el icónico tejido de la marca de lujo.
La colección viene en una textura psicodélica que combina seis colores y en variantes blanco y negro. Se compone de remeras, shorts y camperas deportivas para hombre y mujer, pensadas para entrenar y competir. Lo más importante, están fabricadas con Prime Knit, el textil desarrollado por Adidas, transpirable, y que protege del clima.
La línea la completan tres modelos de las zapatillas Ultraboost, por primera vez desarrolladas con la técnica space dying -una especie de batik más tecnológico- y tejidas con el icónico entramado Missoni. Mantiene la entresuela Boost y el talón moldeado Fitcounter, que dan ajuste, soporte y amortiguación.
A pesar de haber vendido el 41% de la compañía, la gerencia y dirección creativa de Missoni permanecen en las manos sagradas del apellido, asegurando este tipo guiños a la tradición y sumando innovación a través de cápsulas específicas. La unión hace a la fuerza.