El cantante detrás de Xavier estrenó música. A días del lanzamiento de “Raros”, nos cuenta sobre el nuevo proyecto con potencial de trilogía y cómo se adapta a las nuevas reglas de juego, tanto en la vida como en la industria.
El look pelirrojo y la impronta canchera, esa inherente a ser una de las dos mitades de la fórmula Illya Kuryaki and The Valderramas. Emmanuel Horvilleur le cuenta a Le Banana por Zoom sobre su nuevo trabajo solista, “Raros”, que cobró vida de manera remota, con la ayuda del celular. El músico se adapta a la “nueva normalidad” y seguirá regalándonos canciones, que terminarán de integrarse en un álbum cuando pueda romper el distanciamiento social preventivo y hacer arte desde un estudio. Además contó que “extraño mucho el fútbol, transpirar, descargar. Trato de moverme un poco en casa, pero la cancha tiene una cosa diferente”, nos dice el hincha de Vélez que es uno de los 11 jugadores de un equipo de celebridades. Leé la entrevista, conocé sus planes en solitario y a dúo, con el documental que se viene de una de las bandas más icónicas de Argentina.
¿Cómo te sentís habiendo estrenado música en cuarentena?
Contento. Me sirve para enfocar las energías, conectarme con mis músicos y seguir para adelante. Agarré un puñado de canciones y me puse en marcha. No es como veníamos acostumbrados a meternos en un estudio y mirarnos las caras, pero a la distancia compartimos otras maneras de ver las cosas, los avances de los temas. Lo positivo es hacerlo de la manera que sea, siento que la música tiene que ir delante de todo. Cómo la hagas es secundario. Yo arranqué teniendo 16 años, mi primer disco fue un vinilo. Ahora la batería la escuché en un celular cuando me la mandó el baterista. La cosas van evolucionando, cambiando constantemente y uno se va adaptando, porque en definitiva tu ligazón es con la música.
En tus palabras, Raros comenzó a gestarse una calurosa noche del 3 de febrero con la extraña sensación de que algo nos estaba por pasar a todos. ¿Qué pasó esa noche, tuviste una sensación premonitoria?
Muchas veces uno tiene sensaciones premonitorias en la música o, de alguna manera, se adelanta a algunos hechos. No me considero un Nostradamus ni nada de eso, de hecho, seguro que por esos días ya había información de Covid en el mundo, pero a veces algunas noticias nos pasan por al lado…Surgió de una situación de pareja y empecé a escribir una canción que hablaba un poco de que “nos soltamos cuando estamos raros”, como dice el estribillo. Y se terminó adaptando a este momento que vivimos.
¿Cómo se relaciona con la temática cósmica del videoclip?
Empezamos a pensar un correlato visual de reflejos, con los teclados y todas las capas musicales que tiene la canción. Definimos una paleta de colores y formas que para mí también tienen su sensibilidad, no porque el video fuera una animación iba a carecer de lo sensible. Por el contrario. El video más la música formaron una amalgama que encastra bien, es un todo. Le recomiendo a la gente que si quiere escuchar la canción, vaya a Youtube y vea cómo la imaginé.
Xavier es tu segundo nombre en francés y tu alter ego. ¿En qué se diferencia de Emmanuel? ¿Cuánto va a haber de él en el disco que viene?
En realidad sigo siendo yo. Es el título que le encontré al disco después de esos años de la vuelta de Kuryaki. Sentía que se estaban abriendo ciertas cosas de mi historia personal que se iban plasmando en las canciones y me pareció bueno que fuera algo que no se sabía que estaba ahí. Xavier está con “X” en mi pasaporte francés, no lo inventé. Fue una manera de revalidar mi gusto por hacer música solista. Siento que inauguró algo que va a continuar, mi próximo disco va a ser un Xavier 2. Mi idea ambiciosa, pero idea al fin, es hacer una trilogía, que sean tres discos Xavier, que cada uno tenga algo que lo identifique, desde la tapa, desde el arte, pero también desde lo musical.
En una entrevista dijiste que como solista podés explorar otros sonidos que escapan de los límites de los de IKV. ¿Cuáles son los que pudiste incorporar en Raros?
Tiene cosas del color de la música que me gusta cuando me pongo más pop y juego con las texturas, con los teclados, que me inspiran tanto. Y es una letra más personal, mientras que en Kuryaki nos gusta escribir desde la tercera persona. En la carrera solista uno habla más en primera, como Xavier, que es algo muy mío. Además hay que ver si la otra persona quiere cantar ese tipo de vivencias, más cuando como amigos sabemos que son cosas de cada uno.
La estética siempre te define en cada etapa musical, como en tu disco anterior el amarillo era la clave. ¿Cómo viene lo próximo en cuanto a la imagen?
La estética de esta etapa es sacarse, liberarse un poco, estar en pantuflas -se ríe, mientras nos muestra las pantuflas rojas que lleva puestas-. El amarillo lo venía viendo en muchas situaciones y me gustaba. Por ejemplo, Prince lo usaba mucho, siendo un color que para la gente de los teatros es mala suerte, entonces me gustaba liberarlo de esa idea. De hecho me teñí el pelo medio amarillo, ahora estoy pelirrojo porque me lo saqué con una tintura, tengo las canas que están ganando fuerza y quiero que aparezcan. Estoy en un momento relajado con respecto al look.
¿Para cuándo podemos esperar el nuevo álbum, o este es un single suelto?
Mi idea es seguir sacando algunas canciones más. Para el álbum me gustaría tener sesiones de estudio, meterme con otra gente para probar cosas. Ya hay un tema en carpeta para tener a continuación de “Raros”. Iremos paso a paso, para sacar el disco en 2021.
¿Cómo te llevas con los lanzamientos de singles, vos que estás más acostumbrado a los discos y obras conceptuales? Porque son como las nuevas reglas de juego.
Lo que pasa es que algunas reglas de juego te gustan y otras no, y a esta pude encontrarle la vuelta. En esta era, el single es una herramienta que aprendí a disfrutar, nos ayuda un poco a los músicos con la ansiedad de tener que esperar un año y medio para lanzar un disco. Te permite seguir contando cosas sin tener que esperar tanto tiempo.
Hiciste un feat con Usted Señalemelo (“Como un pez”). ¿Qué otros artistas jóvenes te gustan?
Hay un montón de artistas buenísimos. Además de Usted Señalemelo, me encantan 1915, Bándalos Chinos, Florian, Juan Ingaramo, obviamente lo que hace mi hermano Lucas Martí, Dante (Spinetta), Chiara Parravicini, Chita. La verdad es que las chicas vienen con todo, están sacando cosas muy lindas y sensuales, es una cosa muy nueva para la música de acá.
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¿Qué música estás escuchando ahora? ¿Se pasan música con André (hijo)?
Con mi hijo en la cuarentena estamos escuchando el rap de los 90, 2000. No es la vieja escuela, es el G-funk, de Snoop Dogg, Tupac, Dr Dre, 50 Cent. A él le está gustando mucho y yo lo estoy reviviendo.
¿Si tuvieras que armar el podio de tus influencias musicales?
Mi podio sería una especie de Himalaya, porque me siento una persona muy influenciable, me gusta tomar cosas y verme inspirado por músicos que me gustan, como Luis y Dante Spinetta, mi hermano Lucas, gente iluminada como Prince, Caetano Beloso, las hermanas Solange y Beyoncé Knowles, Madonna, María Betania, Billie Holiday, Ella Fitzgerald. Inclusive Lía Crucet, para mí es una reina de la música tropical argentina.
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No tenés prejuicios.
El prejuicio es algo que va en contra de la música, uno sí puede tener juicio, pero es como decir “A mi no me gustan las alcaparras”. ¿Pero las probaste? “No, pero no me gustan”. Bueno, ¡probalas! Yo ese concepto lo adapto mucho, no hay estilos de música que no me gusten, en todos hay gente grosa.
¿Qué cosas estás aprovechando para hacer en cuarentena?
Limpiar, cocinar, ordenar, eso me lleva bastante tiempo, no me gusta tanto pero hay que hacerlo. Veo series, ahora estoy viendo “Algo en qué creer”, que es danesa. Me gustaría ver un poco más de cine antiguo europeo, pero la calidad no es tan buena.
¿Sentís ganas de volver con Kuryaki en un futuro cercano? ¿Lo hablás con Dante?
Esa posibilidad siempre está, a mi gusta tocar en Kuryaki, lo que significa, cómo nos fusionamos y compartimos con otros músicos, pero por ahora cada uno está en la suya y creo que va a pasar un largo tiempo de carrera como solistas. Tenemos un plan de hacer el documental de Kuryaki, en eso nos vamos a poner a trabajar ahora. Está bueno recordar las cosas que hemos hecho, que son muchas; cuando nos ponemos a ver material de 15 o 20 años atrás es un flash.
Imaginemos que tu sello te pide grabar una colaboración con una banda la semana que viene y vos podés decidir con cuál. ¿A quién elegirías?
Si es la semana que viene, espero que sea con alguna que haya respetado la cuarentena, mínimo (risas). Lo haría con Adrián Dárgelos, con Babasónicos.
Si tuvieras que invitar a un artista al escenario en tu próximo show. ¿A quién llamarías y qué canción tuya interpretarían?
“Ella dijo no” y la cantaría con Lenny Kravitz. Que estudie un poco español.
LB Top five
Una ciudad: Buenos Aires
Un ícono: Bob Marley
Una peli/serie: Wild At Heart, de David Lynch.
Una canción: Wicked Game, de Chris Isaac. Es la canción de la película
Una golosina: ¿Una sola? Tita
