El verano de Carmen Alen reversiona básicos en clave deportiva y colores de alto impacto.
Dolores Trull, María Vázquez, “Star Guitar”, de The Chemical Brothers, Nicole Neumann, Andrea Bursten, Paula Colombini, Mariana Arias y Fat Boy Slim, todos juntos, en la pasarela de Alen, en BAF Week.
La obsesión de este verano viene de la mano de los noventa. Aquellos años que vieron nacer a la diseñadora millennial que se formó junto a Jessica Trosman y luego hizo carrera en marcas comerciales locales. Si para algunos esta década volvió al ruedo, Carmen (28) parece estar disfrutándola por vez primera.
Propuso tonalidades de alto impacto en ropa de impronta deportiva. Por un lado, una silueta adherente en vestidos cortos, monos y outfits de dos piezas – en tops de un hombro y leggings- en fucsia, amarillo, rojo y negro. Se vieron muchas pailettes, Lycra y spandex, al mejor estilo American Apparel.
Por el otro, una morfología oversize que se correspondió a materiales más pesados: denim, rústico de algodón y jersey aparecieron en track suits enormes en bermudas, canguritos y maxi buzos a modo de vestidos, con trench de jean y maxi camisas, combinados con stilettos de raso y medias futboleras cortas que rezaban el nombre de la marca, el número de su colección -la segunda- en tipografía góticas y códigos cumbieros como “eh, vo pata sucia”.
